El trabajo en equipo parte del respeto y aceptación del otro, fundamentado en el diálogo, la comunicación y la escucha. Reconociendo que todos somos diferentes y podríamos aportar distintas ideas, grandes cosas desde las experiencias propias del ser de cada uno; permitiendo conocer los pensamientos y aportes de cada integrante, aportes valiosos encaminados siempre al objetivo en común a alcanzar. Para el éxito de este trabajo en equipo es importante delegar roles y responsabilidades dentro del cual se resalta delegar un líder, quien se eche el equipo al hombro, quien dirija y organice las ideas propuestas, quien de forma a la cabeza y cuerpo del equipo para así, trabajar todos en beneficio del objetivo en común y lograr grandes alcances, crecimiento personal y en equipo, fortaleciendo el conocimiento, la entrega, teniendo siempre la mirada en el objetivo por el cual estamos trabajando.
Comparto la frase de Ray Kroc.
«Ninguno de nosotros es tan bueno como todos nosotros juntos». Ray Kroc.
